BERLÍN.- El ministro alemán de Relaciones Exteriores, Guido Westwerwelle, reclamó ayer a los políticos germanos que no usen los problemas de los países europeos en crisis para intentar ganar votos en las elecciones generales, que tendrán lugar en septiembre, y a no recurrir a la típica "arrogancia teutona". "Deberíamos llevar a cabo esta campaña sin humillaciones ni insultos a los países vecinos", subrayó en el Foro Europeo organizado en Berlín por la televisión pública alemana WDR, donde se opuso a los nacionalismos. El ministro liberal advirtió en contra de "cualquier forma" de soberbia alemana porque, según él, a la primera economía europea no le sirve a la larga que a sus socios europeos les vaya mal.
Westerwelle insistió en que Europa se encuentra en un momento clave porque su imagen y la de Alemania, como locomotora del grupo, están marcando el panorama global; y sugirió a los políticos europeos que no se ocupen sólo de sus problemas y se fijen más en el resto del mundo. (DPA)